13/05/2015

La lucha contra la apología de la anorexia en Internet, cuestión de voluntarismo

Las páginas que fomentan y hacen apología de la enfermedad deberían estar prohibidas

"Toma mucha agua, eso engañará a tu estómago". "Mastica hielo", "Recuerda que la obesidad es asquerosa". "Cómo vomitar sin que tus padres se enteren". Son algunos de los mensajes y consejos que albergan las miles de webs que promueven trastornos alimenticios como la anorexia, a la que consideran un 'estilo de vida' en lugar de una enfermedad.

Webs que son legales y de fácil acceso, sobre las que no existe una regulación a nivel europeo, como tampoco la hay sobre la publicidad que llega a los menores y fomenta este tipo de trastornos. Este asunto ha sido llevado a la Comisión Europea por la eurodiputada española Beatriz Becerra (UPyD), tras constatar la ausencia de un marco normativo comunitario y ante la "sorprendente falta de uniformidad entre los diferentes Estados miembros en el modo de regular este tipo de publicidad".

La pregunta, presentada a la Comisión Europea la pasada semana, tiene su raíz en el Proyecto de Ley sobre Sanidad que se tramita en Francia, y que contempla penalizar la publicidad que pueda incitar a trastornos alimenticios como la anorexia al emplear modelos especialmente delgados o desnutridos, así como la creación de un "delito de incitación a la delgadez excesiva", medida dirigida especialmente a las webs que la promueven.

"El objetivo de la pregunta es poner de manifiesto la necesidad de un marco armonizado de exigencia a nivel europeo acerca de lo que constituye una cuestión de salud pública (entre un 6 y un 15% de los niños y jóvenes europeos, un 90% de ellos, chicas), así como conocer la intención de actuar al respecto por parte de la Comisión", explica Becerra.

Esa regulación tendría dos vertientes. Por un lado estaría la publicidad, e implicaría tanto a los creadores de contenidos publicitarios como a los medios que los difunden, si bien, reconoce Becerra, "la autorregulación de anunciantes y medios al respecto funciona considerablemente bien".

Por otro lado estarían los contenidos en Internet "que incitan específicamente a desarrollar trastornos alimenticios, dando consejos sobre cómo actuar, desarrollar y esconder la enfermedad. Las medidas sobre este tipo de sitios web, como sobre cualquiera que incite al odio, la violencia o la generación de un daño físico o psicológico (muy especialmente si están dirigidos o utilizan a menores) deben estar sujetos a una acción normativa concreta".

Puedes seguir leyendo esta noticia en el siguiente enlace.