Prepárate para volver a la rutina

Está bastante generalizada la idea de que la vuelta de las vacaciones significa vuelta a la monotonía, a las prisas y los madrugones.

Podemos hacer que la adaptación sea menos costosa y que empecemos con las pilas bien cargadas. Para ello os recomiendo una serie de pautas que nos pueden ayudar:

  • NO INTENTES ALARGAR LAS VACACIONES HASTA EL ÚLTIMO MOMENTO, esto nos puede llevar a una situación demasiado estresante en la que las demandas del trabajo se junten con las del hogar y nos superen.
  • EMPIEZA PROGRESIVAMENTE CON LAS RUTINAS DEL DÍA A DIA, no intentes abarcar todo al mismo tiempo. Como se dice “Las cosas de palacio van despacio”.

 

  • PLANIFICA ACTIVIDADES DE OCIO Y DISFRUTE, incorpora en tus día a día actividades reforzantes.

 

  • PLANTEA NUEVOS OBJETIVOS, nuevas ilusiones.

Esto es algo parecido a los propósitos de nuevo año. Cuando nos planteamos objetivos personales, hace que sintamos que estamos en un nuevo punto de partida “la carrera empieza” “una oportunidad” de cara a nuestras metas… lo que nos ayuda a aumentar nuestra motivación y actitud positiva. Es decir, nos ayudan a mantenernos activos y con energía.

  • DALE LA BIENVENIDA A LOS HÁBITOS SALUDABLES, todo hábito saludable nos ayudará a sentirnos mejor y esto ayudará a que la vuelta a la rutina sea menos impactante.

Debemos tener en cuenta que para poder mantener un buen estado de ánimo es indispensable una buena alimentación y un buen descanso. Por ello, más pronto que tarde se recomienda volver al ritmo habitual.

Por otro lado, destacar que el ejercicio, el tiempo de ocio y las técnicas de relación y/o meditación también ayudarán a que la normalidad del día a día sea más tolerable.

  • Recuerda:

Olvídate de las dietas “milagro”. Solo faltaba eso…Después de volver a la rutina que encima te autocastigues con dietas restrictivas y aumentes todavía más tu nivel de estrés. Empieza por establecer unos horarios fijos de comidas, vuelve a la sana costumbre de cenar pronto para que no se atrase la hora de irse a la cama y llena la despensa de ingredientes saludables. No se trata de ponerse a dieta sino de retomar una alimentación variada y equilibrada, volviendo a la comida casera. Poco a poco volverás a encontrarte bien y quitarte esos kilos de más que en ocasiones sumamos tras las vacaciones.Planificar los menúsde cada semana nos ayuda a organizar bien la alimentación familiar.

No olvides desayunar para empezar el día con las pilas cargadas.

Realiza deporte de forma regular. Después de un duro día de trabajo, no hay nada mejor que ir a desconectar jugando al pádel, un ratito de gimnasio o corriendo por la playa.

El ejercicio favorece la liberación de endorfinas, unas sustancias químicas que producen sensación de felicidad y euforia.

Reduce el estrés. El ejercicio también incrementa la producción de norepirefrina (noradrenalina), un químico que modera la respuesta del cerebro al estrés.